Archivos Mensuales: julio 2015
El signo de la capital imperial
El signo de la capital imperial
Si a alguien le piden que cree un signo que abarque al mundo y empieza pensando que dicho signo debe significar fuego y hielo; agua, tierra y aire a la vez. Que debe abarcar a lo muy grande y a lo muy chico; a lo que llevamos dentro y a lo que nos es externo; y que debe significar ave, pez, insecto, elefante, gorrión y águila simultáneamente, seguramente dirá que es imposible crear semejante signo[1].
En el idioma de la tribu H’an del país de los C’hang, el signo del mundo es muy parecido a una persona con los brazos y las piernas extendidos y significa: yo y lo demás.
Una ciudad, aunque solo es un punto en el -imposible de medir- mundo, puede contener todos los pasos de muchas personas, y aún si no los contiene todos, puede contener la mayoría, o los primeros y los últimos; de manera que abarca casi sus vidas enteras, o los momentos más importantes de ellas, incluso si pueden disponer de varios caballos.
Creo que era necesario decir lo anterior, porque la capital del imperio hace mucho tiempo es una ciudad muy, muy, grande.
Hay un antiquísimo poema atribuido erróneamente al fundador de mi estirpe que dice algo así como que uno es de una ciudad, solo si en ella quiere a alguien o a algo.
Esta pequeña introducción me sirve como preámbulo a la explicación del origen del nombre de la capital imperial, que ahora paso a explicar teniendo en consideración que el primer paso para conocer a alguien o algo es saber su nombre.
Al tercer emperador de la dinastía de los An -recién iniciado su reinado, cuando contaba con solo diez y seis años de edad- le tocó tratar de sobornar con otro festival poético a la casta de los letrados, en especial a la levantisca secta de los poetas que no han sido formados en ninguna academia, y peor aún, a la acomodaticia tribu de quienes pertenecen simultáneamente a varias escuelas artísticas.
Consultando a sus consejeros llegó a la conclusión que solo la inmortalidad sería un pago apropiado por la complicidad de ese tipo de gente de letras en la creación de la mitología imperial; y en la imposible justificación de la laberíntica burocracia, cuya ineficiencia e ineficacia, ya en esa época, era notoria.
Así que prometió mandar a fundir en el más incorruptible metal los versos del poema que ganara ese año el festival de la flor del durazno, y para hacerlo más competido, permitió concursar a los poetas extranjeros y a los letrados descastados.
Me es simpático este emperador, lo he investigado mucho, mereció su título de “el justo” aunque reconoció, con cándida sinceridad, que era solo defendiendo su monopolio de la violencia, que había combatido los abusos de las otras familias de la nobleza.
Paso a hora a esbozar la personalidad del primer poeta famoso de nuestro imperio.
Li Ta Po, como su nombre lo indica, provenía de un reino en la frontera, muy alejado de la capital imperial; quizá al lado del mar. Evidentemente a alguien con un acento así le fueron vedadas las academias, sin embargo su caligrafía, métrica y ortografías no eran del todo malas, ya que su innata humildad le permitió imitar a los maestros con una admiración muy parecida a una apropiación indebida.
Sobrevivir del arte en la capital imperial, es más difícil que ganarse la lotería; sobre todo para quienes no pertenecen a alguna secta académica o artística, y no tienen influencia sobre el uso que se le debe dar a los modestos fondos que la guerra deja usar en el enriquecimiento cultural de nuestra población y de la humanidad en general.
La recompensa por las horas que pasamos descifrando apolillados y arcaicos manuscritos, los estudiosos de la historia la obtenemos cuando encontramos los motivos que los protagonistas ocultaron a sus contemporáneos y algunas veces pasa, que incluso ellos ignoraron la serie completa de eventos que los empujaron a una acción.
Nuestro poeta llevaba cinco años de aprendiz de orfebre cuando llegó al festival del que nos ocupamos, este hecho es muy importante, porque muchos de sus contrincantes no consideraron la brevedad en sus poemas como una ventaja, mientras que para él –que era muy consciente de los costos del material- era evidente.
Nunca se preocupó por la rima, ni por la redondez o cuadratura de sus textos y aunque nunca fue cortesano, debido a su ocupación de joyero entendió que el mecenas esperaría algún tipo de retribución por el financiamiento de la obra ganadora.
La formación cultural más básica enseña que los emperadores necesitan de los poetas para cantar sus hazañas épicas y demostrar el origen divino de sus estirpes.
Un río de tinta ha fluido tratando el tema de los sentimientos que originó en la gente la vista del único y dorado signo del poema que seleccionó como ganador el emperador en esa oportunidad.
Es casi una verdad que las cuatro expectativas ante la vida (pesimista, apática, equilibrada y optimista) fueron demostradas como las más convenientes de tener, por sus partidarios, por primera vez, en la explosión literaria que provocó su veredicto.
Es del dominio público que ese poema es el nombre de la capital imperial, que es C’Zhan que quiere decir: Palacio terrenal de la estirpe de los An, y se escribe con un solo signo en el idioma de sus nativos.
Nunca he encontrado evidencias que demuestren la veracidad de la leyenda que dice que el poema originalmente consistía de dos signos y que el otro significaba: Bienvenido a:
Es un hecho documentado que el signo de oro original – que fue parte de un tributo pagado a un conquistador proveniente de un reino vecino por el norte, con el que integramos sin distingos el imperio actual- fue fundido.
Los cuatro partidos políticos principales del imperio incluyen al poeta entre sus partidarios fundadores, así mismo las cuatro principales filosofías, religiones, y escuelas artísticas. Pero es demostrable que todos los textos que atribuimos actualmente al poeta fueron retocados e incluso creados realmente por sus seguidores.
Pido humildemente disculpas por mi contribución al río negro antes mencionado.
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Li Tao Po
Para Elia
VABM domingo, 26 de julio de 2015
[1] N del T: Decimos todo e infinito, y por una no muy paradójica coincidencia to do es hacer en inglés e in finito se parece a in concluso, y a sin terminar.
Otra de mis fotos de la luna tomada con mi teléfono 🙂
De la lluvia 5
De la lluvia 5
Me gusta el minuto silencioso
Después que termina la lluvia
Recién bañado el mundo brilla
Barnizado con agua, relumbra
Li Tao Po
Para Elia
VABM lunes, 20 de julio de 2015
La simiente del dragón
La simiente del dragón
El mundo gira
Lo sé
Pero solo siento
Una muy leve briza
Afuera de la choza
Una mujer busca huevos
Debajo de las gallinas
Para nuestra comida
Siempre encuentra
Siempre los cocina
Le quedan muy bien
Como nuestros hijos e hijas
Fue parte de mi botín
De un reino menor
Fruto de la locura y la ambición
Otra conquista de mi familia
Fundé con Ella la mía
Cree amar mi naturaleza
Y que porto la simiente del dragón
Jamás la sacaré de ese error
Li Tao Po
Para Elia
VABM sábado, 18 de julio de 2015
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Infinito @ Inconcluso @ Continuo
Infinito @ Inconcluso @ Continuo
Abajo las nubes
Vistas desde arriba
Igual de blancas
Soy en la montaña
Íngrimo y aterido
Hace mucho frío
Ni el mar de hielo
Ni la cima blanca
Me desgastan
Como la loma
En la que busco
El secreto signo
Que no puede descrito
Que describe al mundo
Pero que extermina
A quien lo han visto
Li Tao Po
Para Elia
VABM 12/07/2015 01:27:54 p.m.
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El señor que no tenía reloj
El señor que no tenía reloj
Dos mujeres se despidieron antes de que el tren llegara a la estación con un disimulado y rápido beso; él notó el beso, y la disimulada y rápida retirada de la que no se bajó. El cerebro del señor que no tenía reloj, muy rápido y disimuladamente archivó el caso en las gavetas con las etiquetas “mujeres no ella”, “besos ajenos”, “metro”, “disimulo otros”, y en dos milisegundos se ocupó de otra cosa.
Los relojes son anacrónicos -pensó-, ¿para qué llevar uno? Además del fastidio de quitárselo en el baño y antes de dormir, con el del teléfono es más que suficiente, es verdad, se dijo y el puso una gran etiqueta de “anacrónico” a todo lo relacionado con los relojes. “Anacrónico”, “reloj”, -pensó-, se rió y se ocupó de otra cosa.
El gran archivo del señor que no tenía reloj rebosa de notas garrapateadas a la carrera, en un montón gavetas con varias etiquetas, nunca encuentra lo que busca, pero siempre encuentra algo que le parece interesante de archivar y etiquetar.
De la gaveta con la etiqueta “hija” sacó una foto, era una niña muy linda y tímida que lloraba mucho, en alguna parte de esa gaveta había un montón de facturas médicas perdidas que nunca pudo descontar del impuesto sobre la renta, también encontró la foto de esa niña con una mujer que se había muerto muy joven y que había amado a esa niña que era la hija de ambos, a esa foto la tiró a la gaveta con la etiqueta “ella”, que estaba muy lejos de la gaveta con etiqueta “resto de mujeres”.
Te besó- le dijo a su hija cuando salieron de la estación del metro
-¿Qué?
Vi que te besó- insistió él.
Ah no, no me vayas a empezar otra vez, tú si eres anacrónico viejo, te he dicho miles de veces que tu vida personal no me interesa, y si tú fueras un poco educado no te interesarías en la vida personal mía, si vivo contigo es porque me lo has pedido; te lo agradezco, pero yo con mi vida y tú con la tuya, nada de complejos de vigilante o policía o sermones ¿estamos? Ya yo estoy bastante mayorcita y hago con mi vida lo que me da la gana. – le dijo mirándolo mientras sonreía con una risa muy parecida a la que tenía en una foto, que le hubiera gustado encontrar, de ella con una conejita que le había comprado cuando tenía cinco años, pero parecía que estaba perdida en otra gaveta.
“anacrónico”, “viejo” – pensó, “papa”
A mi papá le dieron un reloj cuando se jubiló -le dijo a su hija, creo que me voy a comprar uno con el próximo cheque de mi pensión – dijo- como para cambiar de tema.
Hay unos muy bonitos en una tienda que queda cerca -su hija le contestó – si quieres nos desviamos.
Pero ya el señor que no tenía reloj estaba pensando en otra cosa. Le voy a comprar un gato, ya está muy grande para un conejo -se dijo.
Los relojes son anacrónicos y yo anacrónico, no creo que combine mucho la cosa -dijo en tono de broma.
Y ella le contestó- De todos modos, son solo 50 metros y cerca hay un sitio donde te pienso invitar un helado, como en los viejos tiempos.
Para Elia
VABM miércoles, 08 de julio de 2015
Sábado Tibio
Sábado Tibio
Bajo un cielo
Profundamente gris y acuoso
Al final del mundo
Vengo a decirte
Otra vez
Que he vivido
Yo que he sido
Rey y esclavo
General y mendigo
En varios países
Separados y contiguos
En diferentes momentos
Casi consecutivos
Pero eso a ti
No te importa mucho
Mi amor querido
Porque acostumbras
Achacarle al destino
Todo lo que te ha sucedido
Incluso este tímido amor mío
Que se asusta de solo pensar
Lo horriblemente frío
Que puede ser este planeta
Si no te tengo conmigo
Afuera en los tejados
Todos los gatos
Están de acuerdo conmigo
Para Elia
VABM sábado, 04 de julio de 2015